De oscuridad va la cosa. Tras mostrarnos su lado más rebelde con "Problem", Natalia abre las puertas de su pasado para mostrarnos -una vez más- un vídeo más negro que el sobaco de un grillo.
Drogas, violencia doméstica, una fuga de casa y un padre en la cárcel son los elementos que protagonizan este vídeo que encaja a la perfección con la profunda letra de "Saturday Night": una balada pop elegante pero bastante más intensa que las pertenecientes a este género. Me gusta, ya que la producción -llevada a cargo por Jeff Bhasker ("We Are Young")- la hace distinguida, y el poner voz de Lana Del Rey en la canción es todo un acierto por parte de la señorita Kills -por no decir que los coros son una delicia.
La verdad es que el clip pone algo los pelos de punta (sobretodo cuando sale un vídeo real de ella de pequeña con su padre grabado en el 95); lo suficiente para interesarse por su segundo álbum de estudio "Trouble", que saldrá a principios de Septiembre.
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