Como bien es sabido, el segundo álbum es probablemente el más determinante en la carrera de un artista (aunque sería mas correcto decir que el álbum posterior al boom exitoso es el mas importante), ya que posiciona a su autor.
Ariana ha tenido su boom este año con sus dos monstruosos hits "Problem" y "Break Free", y con su colaboración a tres bandas en "Bang Bang". Todas top 10 y con abundantes ventas y certificaciones -e incluso algún que otro récord-, por lo cual se esperaba un disco a la altura (comercialmente hablando). ¿Resultado? Un acertado debut en el #1 de la lista de álbumes, pero sin romper la barrera de las 200.000 copias...
¿Se considera esto un flop? Teniendo en cuenta cómo está el mercado y que con las plataformas de música en streaming apenas hay ventas físicas y/o digitales de álbumes (a no ser que traigan bajo del brazo contratos exclusivos con iTunes, ¿verdad BEYONCÉ?), no.
Pero aquí no vamos a juzgar sus ventas, sino la calidad del mismo. El año pasado nos presentó un disco que seguía la línea del R&B clásico y que contaba con muchas baladas con una notable calidad. ¿Logrará superarse a sí misma? Veámoslo.
El disco podría dividirse en dos partes: la que pretende ser comercial y la que pretende sacar partido a su voz y consolidarse como la nueva Mariah. Solo hace falta ver la lista de productores para darse cuenta de ello.
Presentados por la exitosa "Problem" (uno de los mayores hits del año e impositora oficial de la moda de las trompetas en el pop) y la pegadiza "Break Free" (pese a quien le pese, los temas de EDM con grandes voces como Christina Aguilera o la propia Ariana, siempre que estén bien producidos, nunca entran mal), nos encontramos con la primera mitad del disco. En ella vemos temas con productores de primera línea como a David Guetta en "One Last Time" y al vocalista de OneRepublic en "Why Try". Personalmente me gustan ambos, pero no cumplen su propósito de sonar a single de platino.
Pero por otro lado tenemos a los que sí suenan a single y a temazo al mismo tiempo: "Love Me Harder", que tiene todas las papeletas para ser el siguiente sencillo y es lo mejor de este disco; y "Hands On Me". La primera es... Atemporal, adictiva, perfecta... Y todo el mérito de ello es de The Weeknd, el colaborador. Transmite un sonido tan diferente y novedoso que como se haga famoso este tema, será llevado a todos lados. Os lo aseguro.
Y por otro lado tenemos "Hands On Me", la que debería ser el single que cerrara esta etapa. Es el "Can't Be Tamed"/"Dirrty"/"Slave 4 U" de su carrera. Con un buen videoclip y promoción podría cerrar esta era con un polémico final. Pero todo depende de ella y su discografía. Independientemente de todo, es mi segunda favorita.
Y con ello llegamos a la segunda parte de este trabajo, que cuenta con más R&B y donde se encuentran las baladas. Se abre con "Best Mistake": insoportable para algunos, emotiva para otros. Yo la veo bastante sincera, sobretodo teniendo en cuenta que es la única canción compuesta por ella, y que colabora su rumoreado novio Big Sean. Una de las que más he escuchado este verano.
Y después tenemos dos cortes R&B: uno con un toque oriental "Be My Baby" y uno que samplea un sample, "Break Your Heart Right Back"; y dos baladas para cerrar: "Just A Little Bit Of My Heart " y "My Everthing". Y de todas estas solo me llama la atención la segunda, por lo pegadiza que es y por el mensaje que transmite. El resto es un poquito de relleno.
Así que podríamos darle un notable a este disco, al que yo calificaría como la evolución natural de una estrella del pop: nuevos estilos, pero sin despuntar mucho de su esencia. Y si no queréis escucharlo entero, os dejo con los temas que verdaderamente merecen la pena: los singles que ya habréis escuchado, "Hands On Me", "Break Your Heart Right Back", " Best Mistake " y "Love Me Harder".
No hay comentarios:
Publicar un comentario