Uno de los comebacks más esperados de este musical 2013 (con el permiso de los príncipes del Pop) era el de Lady Gaga. Fotos promocionales con desnudos, vídeos de yoga y tweets con composiciones eran la únicas pistas que recibíamos de un single que no vería la luz hasta el lanzamiento de su vídeo oficial (19 de Agosto).
Pero había tanta expectación acumulada, que los hackers se hicieron con el esperadísimo tema y lo filtraron en la red, convirtiéndolo en una obligación por parte del equipo de Gaga de estrenarlo el día de su filtración.
Dejando la historia de su lanzamiento a un lado, Applause ha sido más un disgusto que una alegría (para el público general). En mi caso, ha sido lo primero. Me explico: cuando se filtró Burqa/Aura, me esperaba un primer single con una electrónica más experimental y mezclada con algún género, para darle un toque más diferenciado, ya que en esa demo lo había. Pero pensando las cosas en frío, hay una explicación muy lógica para que este tema dance simplista sea la carta que presenta el 4° álbum de estudio de la carrera de la Germanotta: las ventas.
Recientemente, Gaga en una entrevista dijo que Applause iba a ser descartada del disco, ya que era la peor (en comparación al resto) y que podría no estar al nivel de las demás. ¿Por qué entonces la incluyó? Por una estrategia de ventas muy sencilla: estrenas una canción simple, comercial, pegadiza y con ninguna polémica de por medio para que le guste a todo el mundo, y ya el fanatismo, las presentaciones en directo y el llamado "efecto comeback" te llevarán al #1. Por lo que cuando estrene el resto de singles, que serán de mayor calidad que Applause, estos subirán por sí mismos en las listas de medio mundo.
Si la intérprete de Poker Face hubiese sacado -por ejemplo- Burqa como primer single, y se hubiese dejado Applause como segundo o tercero, este último no habría llegado a los primeros puestos de 42 países ni de coña. ¿Entendéis a dónde quiero llegar?
Como he dicho antes, Applause me lo experaba algo más... Gaga - definiendo a "Gaga" como la autora de Born This Way-, pero lo que hemos recibido ha sido un retorno a 2009, con la Gaga de The Fame (solo que sin los "ma ma ma mah").
Electrónica con cierto toque ochentero, giros vocales muy interesantes, estribillo con gancho y una falta de subidón (agradecido) que la desetiqueta de la categoría del dance genérico. ¿La mayor pega? Su escasa duración demasiado radiofriendly. Genial para las emisoras, fatal para los oyentes.
Lo único que sacamos en claro es que la Gaga revientapistas, pérdida en 2010, ha sido hallada y ha vendido para hacernos sudar la gota gorda en las discotecas este otoño.